Bitoxinas

¿Cómo afectan a la salud de las personas las biotoxinas marinas?

La ingesta de moluscos que contienen biotoxinas (procedentes de las algas que han ingerido por filtración) puede provocar intoxicaciones alimentarias agudas que presentan sintomatologías muy diversas. Las más importantes son las siguientes:

Intoxicación paralizante (PSP): debida a determinados géneros de dinoflagelados (Alexandrium, Gonyaulax, Gymnodinium) productores de unas toxinas que provocan parálisis de las extremidades de la persona en un grado que depende del tipo específico de toxina implicada, la cantidad ingerida y la capacidad para eliminarla de cada uno.

Intoxicación diarreica (DSP): causada por un tipo de toxina producida por los géneros Dinophysis y Prorocentrum, y que ingeridas con los moluscos, provocan síntomas gastrointestinales..

Intoxicación neurotóxica (NSP): producida por un tipo de toxina de Karenia (Gymnodinium) breve, que puede provocar parálisis ligera de los miembros, síntomas gastrointestinales y broncoespasmo.

Intoxicación amnésica (ASP):  producida por un tipo de toxina de Karenia (Gymnodinium) breve, que puede provocar parálisis ligera de los miembros, síntomas gastrointestinales y broncoespasmo.

Históricamente, diversos autores han descrito numerosos episodios de proliferaciones de algas productoras de biotoxinas (en las costas atlánticas gallegas sobretodo) que coinciden con la detección de cantidades significativas de biotoxinas en especies marinas como el mejillón u otras especies de bivalvos. En Cataluña, se conocen también episodios históricos y recurrentes de mareas rojas en la costa tarraconense (1998, 2007) y en otros lugares del litoral. Entre los años 1976-1981, la presencia en las costas gallegas de algas tóxicas microscópicas se asoció a diversos sucesos de intoxicación por consumo de marisco que presuntamente causaron más de 5.000 casos de gastroenteritis en todo el Estado y que marcaron un antes y un después en la historia de la acuicultura en Europa.

La estadística epidemiológica en España con relación al número de casos de intoxicaciones producidas por biotoxinas marinas es, una vez más, muy limitada. Desde el punto de vista casuístico, durante el transcurso del periodo 2003-2006 se notificaron en España 341 casos de intoxicación alimentaria por biotoxinas procedentes de pescado y marisco en un total de 51 brotes, más del 20% de los cuales en Cataluña. Las toxinas diarreicas DSP fueron el agente etiológico implicado en 3 de los brotes y no se describió ningún caso de PSP, ASP o NSP.

La diagnosis de las biointoxicaciones se basa casi exclusivamente en los síntomas y en la confirmación del consumo reciente de determinadas especies de marisco en el historial clínico de los pacientes. La detección de la toxina en el enfermo o en restos del alimento exige técnicas sofisticadas no siempre al alcance de los laboratorios convencionales. De hecho, la diagnosis exacta del tipo de envenenamiento por biotoxinas no es necesaria desde una perspectiva terapéutica dado que el tratamiento médico subsecuente tampoco es específico.

Los mamíferos marinos (ballenas, delfines) también son víctimas de las biotoxinas marinas cuando comen presas contaminadas por estas substancias nocivas, tal y como pasa con el hombre. Las biotoxinas afectan el sistema neurológico de los mamíferos marinos provocándoles temblores y desorientación, por la cual cosa pueden morir.